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Te mereces una escapada¡

 

                     

 


 

Hay que acercarse para verlo …. es una mosca¡¡¡¡

En mis visitas guiadas me encanta contar esta historia.

Estamos en la capilla del Palacio Ducal, hay un roll-up del cuadro que representa la imposición de hábitos a los primeros frailes carmelitas en Pastrana y bajo la letra B y situado al lado de Santa Teresa un personaje, fray Baltasar Nieto.

La escena se desarrolla el 9 de julio de 1569 y en el acto fray Baltasar Nieto o fray Baltasar de Jesús pronunció el fervorín (jaculatoria fervorosa) e incluso la Santa, que le tenía por buen predicador, no dudo en darle la palabra en esta toma de hábitos de los dos ermitaños italianos, ni la presidencia al año siguiente en la profesión de estos.

Fray Baltasar Nieto aparece desde el primer momento de la fundación. Se presenta en Pastrana con el propósito de ser admitido entre los Descalzos, venía expulsado por “revoltoso” de su provincia andaluza y Pastrana era el sitio ideal para burlar la obediencia a su provincial.

Tanta prisa tenía en conseguir sus objetivos que se impuso a sí mismo el hábito Descalzo. Fue elegido inmediatamente vicario y poco después prior de la comunidad. Él impuso el hábito a doña Catalina de Cardona, ermitaña con fama de milagrera y travestida de fraile; presenció en Madrid el arrebato vocacional de la Princesa de Éboli y corrió a dar la noticia a las monjas de Pastrana.

El padre Gracián hubo de ponerle penitencia en Almodóvar  ”por ciertos escándalos que había dado de mal ejemplo”.

La propensión a la maquinación y al enredo le eran connaturales y los celos patológicos hacia el padre Gracián eran superior a sus fuerzas. Puso en marcha la calumnia de que Gracián era un donjuán y los Descalzos unos alumbrados.

Desapareció en el difícil momento de la mudanza de las monjas de Pastrana a Segovia.

Estos hechos y otros tantos hicieron que el pintor pusiera sobre su frente una mosca, símbolo de maldad.